La iniciativa ha estado en acción desde 2016 y recibe cientos de proyectos anualmente, todos diseñados por empleados, que terminan siendo más comprometidos y participativos
El ahorro millonario y el mayor compromiso de los empleados son algunos de los resultados del programa Santa Helena Productiva, basado en la metodología Lean, que establece criterios para eliminar desperdicios, reducir gastos y optimizar el proceso productivo. Activa desde 2016 en la industria alimentaria responsable de marcas como Paçoquita y Mendorato, la iniciativa ya cuenta con más de mil proyectos e, incluso durante la pandemia, las ideas siguieron surgiendo, o mejor dicho, fueron aún más creativas y voluminosas.
En 2020, según informó Devanir Medina, gerente corporativo de Ingeniería, Seguridad y Calidad de Santa Helena, “a pesar del escenario crítico y las dificultades impuestas por la distancia, el número de proyectos siguió creciendo y apalancándose aún más en este segundo semestre”. De hecho, los objetivos planificados están muy cerca de ser alcanzados. Fue a través del programa que surgió la idea de hacer de la home office una actividad híbrida en el sector administrativo, por ejemplo.
La metodología Lean desarrollada en Santa Helena, en la que ya hay más de 500 profesionales capacitados, cuenta con el aliento de directivos llamados Champions. Son responsables de liderar el procedimiento conocido como Ideación, en el que, a partir de reuniones que involucran a todo el equipo, plantean problemas, discuten soluciones y definen cuáles son los proyectos clave para el período, centrándose en lograr los resultados financieros de cada departamento. Estos profesionales, así como los creadores de proyectos, siguen recibiendo puntos en las propuestas de desarrollo profesional.
Aunque desafiante, este año fue el más productivo de todos para el programa Santa Helena Productiva. Se presentaron más de 1.500 ideas. De este total, 189 fueron priorizados y transformados en proyectos. Medina señala que, para las empresas que se inspiran en el modelo trabajado por la industria ubicada en Ribeirão Preto (SP), es necesario entender la acción como un programa que no tiene fecha de finalización. «Como proceso de mejora continua, no tiene un ciclo de vida establecido».
La planificación también es importante, por lo que las metas para 2021 comenzaron a establecerse al comienzo de esta segunda mitad. “Durante este periodo, realizamos varias capacitaciones y otro tipo de capacitaciones para prospectar e identificar nuevas oportunidades para el próximo año. Como resultado, se mapearon más de 100 iniciativas y ofrecen un alto potencial de ganancia financiera y competitividad para la empresa”, explica el gerente. Con proyectos dirigidos a departamentos como Producción/Ingeniería, Suministro/Calidad y Comercial, por nombrar algunos, la compañía espera renovar los buenos resultados recogidos desde el inicio de la operación. “El programa Santa Helena Productiva ya ha acumulado, en los últimos cinco años, una reducción de costos de más de R$ 110 millones y esperamos que en 2021, en vista del escenario de recuperación económica, nos pueda traer aún más competitividad”.